Confieso que jamás he leído The Golden Compass.
Confieso que hasta el día de hoy, no sabía ni siquiera que existía.
Confieso que durante muchos años la biología me tuvo alejada de la literatura, y que la comunidad elejotera es la que me está (re)educando en mundos paralelos ajenos.
Gracias *coliflor para las fangirls desquiciadas y su manía de
(
Read more... )